Escrito por Patricia Araque, Co-Fundadora y Directora de Ellas 2.0.
Las mujeres somos, como mínimo, la mitad de la población mundial. Esto nos lleva a una conclusión obvia: el crecimiento económico y la disrupción en el mundo de los negocios en Latinoamérica, tiene que venir, lógicamente, de la mano de esas mujeres que aún no se han incorporado a la industria y que a día de hoy siguen siendo minoría.
En el último año he tenido el privilegio de adentrarme en el mundo del emprendimiento tecnológico en Latinoamérica y conocer personalmente a emprendedoras de toda la región que a través de su trabajo diario están marcando la diferencia en sus ecosistemas locales y convirtiéndose en ejemplos y referentes a seguir por muchas otras. Todas esas profesionales tienen en común las siguientes cualidades:
Están hiperconectadas con el resto del mundo a través de la tecnología y dominan el inglés como segundo idioma.
Esa mirada global no les impide ser muy conscientes de los problemas que aún están pendientes de ser resueltos en sus comunidades locales, así que participan activamente en su mejora, muchas veces de manera voluntaria.
Han creado con anterioridad y simultáneamente a sus emprendimientos un network profesional y redes personales de apoyo, que les ayudan a conseguir sus objetivos a través de relaciones basadas en la confianza.
Aprovechan cualquier oportunidad que se les presenta para visibilizar sus logros y sus proyectos, no tienen miedo a exponerse.
Son curiosas y colaborativas y viven a través de un paradigma de mente abierta que las convierte en profesionales flexibles, siempre dispuesta a aprender y en constante reciclaje.
Estas características no son exclusivas de las emprendedoras con las que he tenido el privilegio de trabajar a lo largo de este año en la región, en realidad se replican en cada una de las comunidades con las que trabajo diariamente en Europa y Estados Unidos. La parte más bella y más gratificante del trabajo que hago está en conectarlas, porque cuando todas estas mujeres se conectan y se empoderan unas a otras, es cuando el cambio comienza a producirse de manera más auténtica.
Todas y cada una de ellas se enfrentan a retos específicos en función de su país, no podemos olvidar que cada ecosistema es diferente y cuenta con su propia idiosincrasia. Además, hay desafíos que no tienen que ver con el género como es el acceso a financiación, que es retador tanto para hombres como para mujeres. Pero hay muchos otros que afectan específicamente a las mujeres y que se replican en cada uno de los ecosistemas locales:
La crianza de los hijos sigue recayendo mayoritariamente en las mujeres.
La falta de capacitación, específicamente en áreas técnicas.
Falta de modelos de referencia y limitada visibilidad de casos de éxito por parte de los medios de comunicación tradicionales.
Desde Ellas 2.0 hemos intentando poner nuestro granito de arena estos últimos meses dotando de visibilidad a las emprendedoras de la región, conectando a muchas de ellas a través de nuestros eventos y nuestros canales en redes sociales y aterrizando al español mucho conocimiento, inspiración y casos de éxito de los que aprender, que hasta ahora sólo eran accesibles en inglés. Cuando hace más de tres años impulsamos la puesta de marcha de Ellas 2.0 en España inspirándonos en el movimiento que Women 2.0 había iniciado tres años antes en Silicon Valley, lo hicimos con un claro objetivo: incrementar el número de mujeres emprendiendo negocios de base tecnológica, negocios escalables, negocios de alto impacto. Nuestra llegada conjunta a Latinoamérica ha amplificado la dimensión de ese mensaje y nos ha reafirmado en la idea de que las mujeres talentosas están en cualquier rincón del mundo. Latinoamérica puede y debe aprovechar esta fuente natural de innovación. Hacerlo, marcará la diferencia y supondrá un salto cualitativo hacia delante.