
El gobierno de Estados Unidos publicó la semana pasada la primera versión del Public Participation Playbook, un recurso que permite a funcionarios públicos desarrollar y evaluar servicios gubernamentales con apoyo de la participación de la ciudadanía. Este recurso se desarrolló de acuerdo a la intención de identificar y compartir buenas prácticas sobre participación pública declarada en el primer y segundo Plan Nacional de Acción que este gobierno presentó a la Alianza por el Gobierno Abierto (OGP).
El Playbook fue desarrollado en colaboración por más de setenta líderes de decenas de sectores del gobierno americano, representantes de la sociedad civil y organizaciones internacionales (tales como el OpenGov Foundation, la National Coalition for Dialogue & Deliberation, el Banco Mundial, el Deliberative Democracy Consortium y la Sunlight Foundation) y ciudadanos: fue abierto a comentarios del público en tres ocasiones a través de la herramienta Madison. (Esta herramienta permite a los usuarios hacer anotaciones y comentarios en documentos públicos y de esa manera mostrar apoyo o desacuerdo con ellos.)
A través de este proceso, el Playbook fue revisado y distintas inquietudes fueron abordadas e incorporadas en él. El documento toma el formato de un Playbook –un tipo de libro de estrategias o jugadas– en el que se desarrollan qué pasos de alto nivel (las jugadas) deben ser considerados en cualquier esfuerzo de participación pública. Cada uno de estos pasos incluye una lista de control que especifica qué tipo de actividades hay que considerar para asegurar que la jugada sea ejecutada con éxito. Además, el texto incluye casos de estudio y otros recursos para entender las aplicaciones prácticas de las actividades, así como indicadores que pueden ser personalizados según el caso para evaluar el desarrollo de una jugada.